jueves, 30 de julio de 2015

casa y jardín en la bahía


Podría ser un rincón del caribe pero es la bahía de Cádiz. El paraíso del reciclado. Con los más humildes elementos de derribo y desguace se van manteniendo las casitas o cobertizos para las barcas. Elementos pobres y riquísimo sentido plástico. Un paraje delicioso donde, además, se come un sabroso pescado junto al agua. Un enclave que, esperemos, no cambie ni desaparezca.




jueves, 16 de julio de 2015

música entre amigos


En estas noches calurosas de verano la terraza de La Casa Grande es una maravilla, un lugar idóneo para escuchar música y reunirse entre amigos ...y huéspedes. Manolo Rodríguez empezó a la guitarra con música del renacimiento y terminó por milongas y tangos con la colaboración de la delicada voz de Nieves Macías. Una noche preciosa con las bandadas de flamencos dibujando, sobre los focos de San Pedro y bajo el manto oscuro, su viaje hacia norte. Repetiremos, ¡todavía queda mucho verano!

Manolo Rodríguez a la guitarra
Calentando motores : Miguel Gago, Manolo Gutierrez, Elena Posa, Pepa Caro, Manuel Sánchez Sierra, Toy Medina y Paco
En el escenario: Manuel Sánchez Sierra, Pepa Caro, Manoli y Miguel Gago, Elena, Manolo Rodríguez, Nieves Macías y Alicia Barroso
Alicia Barroso, Inés, Elena, Estrella, Nieves Macías, Pepa, Sole Y Manoli
Fotógrafos superestars: MG Abadía y Estrella Serrano Pérez

martes, 14 de julio de 2015

Dulces Hoteles


 El diario de Cádiz, en el suplemento veraniego Levantera del 14 de julio, ha destacado a La Casa Grande abriendo su reportaje sobre hoteles con encanto con una gran foto del patio de nuestro hotel. Se trata de una selección de alojamientos gaditanos "que garantizan tranquilidad, cercanía y un precio para todos los públicos". El artículo de Elena Díaz-Casanova  elige cinco establecimientos de la provincia y esta distinción para La Casa Grande nos honra nos llena de ilusión y nos estimula a seguir trabajando para ofrecer lo mejor a nuestro huéspedes.Tras 16 años ¡ ahí seguimos!








domingo, 5 de julio de 2015

Tema libre, los premios, 2

Juan Mariscal, primer premio. Juan Bazán, de la serie la soledad su mejor compañera.
Manolo Gutiérrez, segundo premio. Flor_nube
Manuel Cuéllar, finalista. En línea recta
Juan Mariscal, finalista. Juan Bazán, de la serie la soledad su mejor compañera.

El miércoles uno de julio, en tarde/noche de luna llena, se reunió el jurado del  Premio de Fotografía La Casa Grande en su quinta edición.

Estaba compuesto por Rafa Palma, José Antonio Carmona Otero, María Luisa Rosety, Amy Linhart, Inmaculada Castro, Luis Velázquez, Yolanda Manzano y Elena Posa. Estefanía González actuó de secretaria sin voto.
En el apartado tema libre

Primer premio: Juan Mariscal, con "Juan Bazán, de la serie la soledad su mejor compañera".

Segundo premio: Manolo Gutiérrez con “nube_flor".

A continuación quedaron empatados Manuel Cuellar, con "En línea recta" y Juan Mariscal con otra fotografía de la misma serie ganadora.

Retratos, los premios, 1

Manolo Gutiérrez. Primer premio en el apartado retratos, Estrella S.
Manolo Gutiérrez. Primer premio en el apartado retratos, Elena P.
Estrella Serrano. Tercer finalista, mujer/árbol
Juan Mariscal. Cuarto finalista, Manuel.
El miércoles uno de julio, en tarde/noche de luna llena, se reunió el jurado del  Premio de Fotografía La Casa Grande en su quinta edición.

Estaba compuesto por Rafa Palma, José Antonio Carmona Otero, María Luisa Rosety, Amy Linhart, Inmaculada Castro, Luis Velázquez, Yolanda Manzano y Elena Posa. Estefanía González actuó de secretaria sin voto.

El Jurado valoró el buen nivel de las obras presentadas este año, discutió mucho sobre los distintos trabajos y tras reñidas votaciones resolvió el siguiente fallo:

a) Retratos en Arcos y/o en otros pueblos de la Sierra de Cádiz.

Primer premio: Manolo Gutiérrez con  "Estrella S".

Segundo premio: Manolo Gutiérrez con "Elena P".

Quedaron finalistas Estrella Serrano, en tercer lugar con “mujer árbol" y Juan Mariscal en el cuarto con “ Manuel".

miércoles, 1 de julio de 2015

el camino de vuelta


 Escucha los cañaverales mientras se cimbrean, óyelos cómo hablan de los amigos perdidos. Cuando naciste te arrancaron de tu cama, mientras llorabas y te agarrabas a ella durante la separación.
(…)
Así somos todos siempre, anhelando encontrar nuestro camino de vuelta, de vuelta a lo único, de vuelta a lo que sólo es uno.

Donde quiera que cuento mi historia, a los tristes y a los felices, todos ellos se acercan a mi, mas solo con sus propios secretos, sin conocer nunca el mío.
También mi secreto a mí me está vedado, pues la luz solo brilla en el exterior.
El cuerpo y el alma son amigos íntimos, mas el alma permanece secreta para todos.

El sonido del cañaveral no es el del viento, sino el del fuego, y sin ese fuego nada somos.
El fuego del cañaveral es el fuego del amor, de la pasión y el calor del amor que están en el vino…

Rumi (inicio del Matnawi)